La irracionalidad de los sicarios
*Tratar de establecer la causa por la cual se convierten en sicarios.
* El interés por conocer estas causas, se enfoca hacia los conocimientos de científicos, psicólogos, criminólogos y demás estudiosos de las características de trastornos de conducta
Taxco de Alarcón Guerrero a 3 de septiembre 2010.
Por: José Alberto Betanzos Salgado.
Los brutales asesinatos que se han perpetrado en estos últimos meses, en la lucha entre carteles del narcotráfico y narco políticos, manifiesta la irracionalidad de los sicarios,, y ha venido patentizando que no tiene límites la bestialidad que provoca la ambición de poder político y el consumo de estupefacientes, asesinando sin miramientos a niños, jóvenes, adultos, y de la tercera edad, hombres y mujeres sin importarles nada, parecieran robots sin sensibilidad humana, y aunque estos dos temas de los narco políticos y el crimen organizado ya están mezclados que van de la mano aquí en México, hoy tratare de centrarme en uno, tratar de establecer la causa por la cual se convierten en sicarios.
Causa mucha inquietud por averiguar qué pasa por la cabeza de aquellos hombres y mujeres que se alquilan para sicarios, ¿Cuál será la causa de la conducta violenta? ¿Cuál será la razón por la cual son capaces de cometer los más horrendos y atroces asesinatos? con tanta saña como si no tuvieran el mínimo sentimiento de seres humanos, ahorcando, mutilando, quemando, disparando sin ningún miramiento, o empuñando cualquier otra arma para asesinar incapaces de persuadirse para no continuar con la barbarie de destruir, cuerpos, vidas, hogares, carreras, patrimonios, familias completas, sin reflexionar que “a hierro matan y ha hierro morirán” por una sentencia divina de nuestro creador, con vigencia sempiterna.
Cuando vemos ya sea de cerca o por otro medio a uno o varios asesinos, nuestra mente nos mueve casi de forma natural, a que analicemos el comportamiento de la persona, su perfil físico y fisonómico, que si la nariz, que si las orejas, los ojos, los labios etc. para tratar de vincular lo que observamos, para identificar una mínima característica de un asesino potencial en serie con solo verlo, pero poco lograremos establecer, si no tenemos conocimientos adecuados, luego entonces el interés por conocer estas causas, se enfoca hacia los conocimientos de científicos, psicólogos, criminólogos y demás estudiosos de las características de trastornos de conducta, quienes hasta el momento no tienen bases científicas para delinear un perfil de este tipo de individuos criminales con trastornos de personalidad que perdieron valores universales, como el respeto por la vida, pero si aseguran los especialistas que no se puede generalizar que los verdugos usen estupefacientes para cometer estos crímenes ni que sean todos de incontrolable agresividad, pero algo que no podrán comprobar es que todos sean realmente sicópatas, aunque si habrá sus excepciones, mas no es determínate, porque hay dementes que no hacen el mínimo daño.
Talvez pudiéramos pensar que fueron niños que crecieron sin ninguna muestra de amor, que fueron severamente maltratados por sus padres o por los que los rodearon en su momento, talvez hasta pensemos que no solo físicamente sino también sexualmente fueron abusados, sin bellos recuerdos de familia, sin haber disfrutado la primera sonrisa de un niño, sus primeras palabras, sus primeros pasos, su primer amor, sin sentimientos de nada para nadie, sin razones para vivir, frustrados y sin la mínima conciencia del valor de la vida y la naturaleza, y sobre todo sin temor a Dios.
Pues no es así, porque existen historias verdaderas de personas que les ha tocado vivir todo tipo de contrariedades y no se convirtieron en criminales o delincuentes, por el contrario superaron todo y alcanzaron felicidad y son personas realizadas, investigando podemos darnos cuenta de que la mayoría de sicarios son individuos que tienen familia, sueños, metas, ambiciones y buscan la felicidad y al igual que todo ser humano tienen amor por alguien o algo, así sea solo por un animal, y la gran mayoría de ellos dice creer en amuletos, en Dios, en la virgen de Guadalupe, y en infinidad de imágenes de supuestos “santos” a los que adoran, rezan y portan confiados la que llaman “santa muerte” hasta se persignan para que su trabajo de asesinar, secuestrar, robar o violar les salga bien y a ellos no les pase nada; en esto último se sustenta que adorar a estas imágenes o amuletos atrae todo tipo de desgracias, porque Dios nuestro creador las aborrece y por tal motivo prohíbe en las sagradas escrituras que se arrodillen y adoren imágenes, o se crea en fetiches, pero también podremos ser testigos de individuos que han tenido de todo para ser excelentes ciudadanos sorprendiéndonos por su integración al crimen organizado como sicarios, luego entonces no es la falta de sentimientos o razones para vivir, mucho menos la falta de conocimiento de que hay un Dios, entonces la causa es una irracionalidad, una falta de plena conciencia de causa y efecto de su conducta, no razonan que Dios nunca los ayudara pues sembrando el mal nunca cosecharan el bien, sería como pensar que sembraran maíz y quisieran cosechar mangos, eso nunca será pues el dinero recibido por sus sanguinarias labores, es dinero maldito para ellos, nunca será para felicidad y prosperidad, solo el dinero bien ganado será de bendición.
Dinero mal habido que servirá para mal, porque de mal procede su ganancia, lo del agua al agua, entonces será siempre insuficiente para solventar vicios, enfermedades y todo tipo de tribulaciones en su persona y en su familia, aparte de que tendrá que pagar protección de otros delincuentes para sobrevivir entre ellos, sufriendo mucho más de lo que hicieron sufrir, condenados a sufrir con creces el daño que han hecho, viviendo en sobresaltos de día y de noche ya sea que tengan dinero o no, en ese círculo vicioso, en donde la infidelidad e infelicidad serán sus amantes inseparables, porque la cosecha esta lista en todo momento en que se siembra el mal.
La incapacidad de razonamiento, es la causa por la que se convierten en sicarios y no es privativa de los sicarios o de cualquier otro criminal, no es una enfermedad mental, es una consecuencia de una serie de errores que derivan de la mala actitud en el hogar, sociedad y de gobiernos corruptos.
Una teoría de la causa por la cual, los sicarios en últimas fechas han cometido los más crueles y sanguinarios asesinatos, no es que sean monstruos sicópatas, ni que rigurosamente hayan sido entrenados para despedazar, mucho menos que sus facciones adustas influyan, si no que hace años cuando todo estaba tranquilo entre los carteles de la droga por la complicidad de las autoridades, la mafia mantenía sus vicios y excesos de jóvenes principalmente, quienes nunca imaginaron hasta donde tendrían que llegar a hacer para cumplir las ordenes de los narcotraficantes, hasta que llego la hora de ponerlos a “trabajar” que hasta ellos mismos se horrorizan, del precio que han tenido que pagar, por los favores recibidos.
Comentarios a: cuartopodertaxco@hotmail.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario